Atamos uno de los extremos de la cuerda a un soporte (por ejemplo una silla). Antes de atar el otro extremo a otro soporte pasamos la cuerda por el interior de una pajita de forma que se pueda deslizar fácilmente por la cuerda. Finalmente montamos el cohete inflando el globo y pegándolo con celo a la pajita que hemos colocado en la cuerda mientras mantenemos cerrada la salida del aire con la ayuda de las pinzas.
Ahora sólo tenemos que colocar el globo en la línea de salida y soltarlo dejando que salga el aire de su interior.
Es curioso comprobar como muchos niños y niñas tienden a colocar la salida del aire en la misma dirección en que quieren que se desplace el globo. Parece que intuitivamente el globo se moverá en la misma dirección del aire.
Pero veamos lo que sucede: Mientras el globo empuja el aire hacia fuera, por el principio de acción-reacción, el aire también ejerce una fuerza igual sobre el globo que hace que éste se desplace en dirección contraria a la de salida del aire. Al estar el globo pegado a la pajita lo estamos obligando a seguir la trayectoria de la cuerda, con lo que se desplaza en línea recta.
Una vez entendido el mecanismo que impulsa los cohetes-globo, podemos comenzar las carreras colocando diferentes cuerdas en paralelo y probando distintas condiciones: globos más o menos inflados, salida del aire más o menos abierta (lo controlamos con unas pinzas), etc.
genial, a ver si esta misma tarde podemos hacerlo en casa !!!
gracias !!
Cuéntanos después la experiencia!
fue muy divertido
Encantados de que lo disfrutárais!
estoy muy orgulloso por este experimento deberian crear cohetes asi en todo el mundo